martes, 29 de abril de 2014

Por sus actos les conocerás

Muchas veces, es con el paso del tiempo, cuando vamos conociendo a las personas. Sabemos en nuestro entorno quienes son aquellas personas en las que podemos confiar, aquellas a las que sólo contamos parte de nuestra vida, aquellas con las que lo pasamos bien para salir o incluso, otras, que aunque nos decepcionen seguimos estando ahí. Personas, al fin y al cabo. Personas humanas con defectos y virtudes. Personas como también lo soy yo. 

He avanzado con respecto a muchas materias en mi vida, he madurado, he reflexionado sobre lo que quiero o no quiero y me he apartado de muchas personas. Ya fuera por motivos de la vida o porque cuando vamos observando vemos, a veces cosas, que no nos gustan. Pero aunque la vida no se desarrolle como uno quiere, es necesario aceptarla tal y como viene. Cada uno es dueño de su vida, cada uno actúa conforme a lo que de verdad quiere y sobre todo, cada uno vive la vida de una manera que puede no gustarle a los demás. Son formas de vivir, de progresar y con esfuerzo, de madurar.

No digo que yo haya sido ni muy buena ni muy mala, simplemente me he comportado cada día de mi vida como de verdad lo he sentido. He experimentado una gran sensación de emociones, algunas muy intensas y otras, un tanto superficiales pero sea como sea, las emociones hay que aprender a controlarlas y sobre todo cuando se trata de las negativas. La rabia, la ira o quizás, la venganza son algo que hay que saber gestionar. Yo reconozco que no soy capaz de sentir odio hacia nadie, independientemente del daño que me hayan podido hacer pero sí que es verdad que existen personas que no son capaces de superar esas emociones negativas.

Y digo todo esto, porque me siento un poco enfadada… Sí, enfadada porque, a veces pasan cosas, que vienen y te hacen recapacitar sobre la vida. Te hacen pensar sobre el sentido que tiene que alguien venga y por cuestiones que no voy a explotar aquí, decida pinchar dos ruedas con una navaja. Me hace recapacitar porque si así la persona que lo ha hecho se siente mejor para sacar o exteriorizar su rabia o similar… Bienvenido sea, pero considero que las formas no son las adecuadas para ciertas edades. Se supone que las personas vamos madurando, avanzando pero está visto que existen otras que se quedan ancladas en mundos paralelos. Se trata de un coche, sí… Se trata de unas ruedas pinchadas… sí… Pero detrás de eso, hay mucho más. Y lo cierto, es que no me siento mal ni me causa resquemor pero sí que me fastidia con respecto al ajetreo que supone.

Me gustaría poder expresarme mejor, me gustaría poder decir más sobre el asunto pero no lo haré… No lo haré porque no quiero y sobre todo, porque no hay que darle más importancia al tema. Pero si quien lo ha hecho pensaba que podría dolerme, tengo que decir que me causa indiferencia, no así con respecto al desembolso económico que supone pero sí con respecto al suceso en sí. 

Actualmente, me encuentro en un momento bastante pleno en el que tengo todo lo que necesito con respecto a mi faceta de felicidad e ilusión. Me siento a gusto con la vida que llevo, con las personas que están a mi alrededor, con la persona que me acompaña, con mi familia… Y aunque a veces he encontrado piedras en el camino, ya me he encargado yo de coger fuerza para apartarlas y seguir dicho camino. Y si esa misma piedra vuelve a salpicar, ya tengo un muro construido para que no pueda ni tan sólo arañarme por mucho que se empeñe...


3 comentarios:

  1. Lo mejor que puede hacerse con esta gente es pasar y como has dicho no mostrar debilidad pues eso es lo que quieren. Da rabia pero mira que triste tiene que ser la vida de alguien que para ser feliz tiene que fastidiar a otro

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    1. Justo pienso eso que dices... Personas q no son capaces de vivir su vida sin molestar a los demás... Vive y deja vivir... Eso es lo q todo el mundo debería hacer!!!

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  2. This blog is amazing! Congratulations!!

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